Una de las maneras más divertida para trabajar obras de arte con los niños, es disfrazarse de alguna de ellas. Hoy quiero enseñar un disfraz del tejado y chimenea de la casa Batlló de Gaudí, situada en el Passeig de Gràcia, de Barcelona. Esta obra fue encargada por Josep Batlló, un adinerado fabricante textil que quería renovar su casa y para ello, recurrió al ya conocido por sus obras, Antonio Gaudí.
En las siguientes fotos podemos ver un trozo de tejado y una de las chimeneas, todos realizados con tela de disfraz de colores, previamente cortada a trozos y cosida sobre un vestido hecho con tela blanca, para representar así, los azulejos de colores que tanto caracterizan a este arquitecto catalán.
En la escuela podemos elaborar este disfraz con bolsas de colores o incluso con trozos de cartulina de colores, pegados sobre una base de plástico o papel.
En esta foto se puede ver el tejado en forma de dragón; por delante azulejos a trocitos y por detrás escatas de pez, hechas con espuma cortada y pintada con spray.
